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Cinco días después de su muerte, el cuerpo de Videla sigue en la morgue. Ayer sus deudos se presentaron ante el juzgado federal N° 3 de Morón -que interviene en los trámites de su muerte por tener jurisdicción sobre el Complejo Penitenciario de Marcos Paz- para buscar los oficios que le permitan tramitar el entierro del dictador. “Debería retirarse en el transcurso de hoy”, agregaron a Infojus Noticias fuentes del juzgado que subroga Juan Pablo Salas.

Según adelantó el periodista Raúl Kollman en su cuenta de Twitter, la familia no pudo retirar el cuerpo de la morgue porque faltaba documentación personal: la libreta de Enrolamiento.

Después de los resultados preliminares de la autopsia -hemorragia interna a causa de una caída donde se había fracturado la pelvis, a la que se sumaron los efectos de la quimioterapia, una patología cardíaca de base y su estado anticoagulado-, el abogado de la familia, Adolfo Casabal Asís, se mostró conforme y aseguró que no iba a proponer otros puntos de pericia sobre el examen.

“En rigor, la morgue no tiene obligación de notificarnos cuando lo retiren. Pero la familia debe aportar el certificado de inhumación dentro de las 72 horas posteriores al entierro, para anexar al expediente”, agregaron desde el juzgado.

Ayer, familiares de desaparecidos de la ciudad de Mercedes, de donde es oriundo el dictador, manifestaron su repudio para que sus restos fueran enterrados allí.